jueves, 19 de noviembre de 2015

Nunca, Nadie

Querida Sofía, ésta noche, mientras tu y yo compartíamos tu cuna, en silencio y en la oscuridad, para que entre vuelta y vuelta que dabas sobre la almohada lograras quedarte dormida tranquila de tenerme a tu lado, caí en cuenta que nunca nadie me había hecho sentir como lo haces tu.

Nunca, nadie se había emocionado durante cada uno de sus dias de vida al verme regresar del trabajo, ni me habian recibido con esas sonrisas, gestos, gritos y abrazos que me das tu.

Nunca, nadie había encontrado ese pequeño hueco que existe entre mis piernas, para esconderse en él y bailar y brincar al ritmo que trae consigo la emoción de estar junto a mi. Nunca, nadie se había aferrado tanto a ellas que me hiciera sentir que sirven para tanto mas de lo que imaginaba.

Nunca, nadie había encontrado en mi voz el tono preciso para calmarse, consolarse y hasta caer dormida. Y definitivamente creo que nadie nunca jamás habrá encontrado mi voz tan encantadora como me haces sentir tu cada vez que te hablo, te canto una canción, te llamo por teléfono cuando estoy lejos o te digo te amo al oído, en un susurro, despacito, sin que nadie mas nos oiga.

Nadie, nunca había necesitado tanto de mis manos, para tomarlas y ponerlas en su cara, y sentir como la acaricio, y poder vivir una vida asi, tocando tus cachetitos, tu naricita, haciendo piojito, sin que lo encontraras cansado al pasar el tiempo.

Nadie, nunca me vio con los ojos de amor que tu tienes para mi, con esa mirada perdida, esa emoción única, esa sonrisa hermosa, esos juegos tan tuyos, esos brazos que llaman los míos, esa boquita que me llena de besos, esas sílabas que, junto a las mías, forman palabras, canciones e historias y cuentos completos, pues nos contamos una vida en palabras conformadas de 2 a 4 letras, y tu y yo nos entendemos perfecto.

Nunca, a nadie mi cara le ha provocado la urgente necesidad de tomarla con tantas ansias y llevarla hacia ella, llenándola una y otra vez de besitos con baba que tanto disfruto, y apretar mis cachetes, rasguñarme y dejarme nuevas cicatrices, todo por la ansiedad de mantenerme lo más cerca posible a ti.

Nunca, nadie me había hecho sentir este amor, tan intenso y tan noble, tan bonito y sincero, que deja a un lado mis defectos, y que disfruta de cada parte de mi como nunca nadie disfrutó.

Asi que Sofi, gracias por prestarme la mitad de tu cuna esta noche, y dejarme reflexionar, pensar y disfrutar de los momentos a tu lado, valorando y haciéndome sentir lo que nadie nunca jamás en la vida podría lograr de no ser por este nuevo amor que me has dado y enseñado Tú, Gracias, gracias, GRACIAS.

Te amo, como nunca nadie.
Tu mami
Karen

1 comentario:

Paty Leal dijo...

Que hermosas palabras mi penkehapito. Gracias por compartirlo =) tqm